El avance del uso de la inteligencia artificial aplicada a la música, abre un nuevo debate ético e incluso legal sobre el uso de la obra de artistas muertos, que involucra a productores, fans y discográficas
El avance constante de la IA promete cambiar radicalmente la forma en que experimentamos y comprendemos el sector audiovisual, alterando tanto la producción como el consumo de contenidos