Con postergaciones, cancelaciones y renuncias variadas además de cesantías laborales y finalización de contratos entre instituciones y artistas, distintos espacios de arte contemporáneo rusos y personalidades de la cultura de los grandes teatros de ese país, como el Bolshoi, manifiestan por estos días su rechazo a la guerra con Ucrania.
El ataque de Rusia a Ucrania es diferente a la mayoría de los conflictos desde la Segunda Guerra.
El director Valery Gergiev fue emplazado a pronunciarse en Múnich y abucheado durante un concierto en Milán. La Royal Opera House de Londres canceló actuaciones del Ballet Bolshoi. Estas y otras acciones reavivan el debate sobre un tema central de este tiempo
Durante años estas dos regiones pasaron inadvertidas, pero hoy concentran las miradas del mundo