Comenzaron las tareas de restauración, a tres años del impactante incendio de la Catedral de Notre-Dame de París, que con dramáticas imágenes y videos dio la vuelta al mundo mostrando cómo avanzaban las llamas sobre una de sus torres mientras el cielo parisino se recubría de humo.
Fue la residencia de 170 voluntarios de la congregación hasta el mes de julio, pero tiene una historia que se remonta a cuando era una fábrica de mosaicos.