A mediados de los 80 la editorial Hyspamérica le hizo una propuesta al autor de “Ficciones”: seleccionar 100 libros indispensables y escribir un prólogo para cada uno. Su muerte dejó el proyecto sin terminar, pero la colección fue editada y se convirtió en objeto de culto. No incluyó a ninguna mujer.
Uno de los ejemplares de la primera edición de la novela que revolucionó la literatura se encuentra en la biblioteca personal del músico, que lo adquirió en 2008
María Elena Walsh, Dante Alighieri, Gustave Flaubert, Antonio Berni y James Joyce, entre otros, son celebrados con exposiciones y encuentros literarios.
El mítico negocio, fundado en París hace un siglo, mantiene su espíritu original y planta cara al comercio electrónico
Por Jorge Forbes, desde Francia, especial para DiariodeCUltura.com.ar.